El Hayedo de Montejo

Hayedo de Montejo de la Sierra

Queremos presentarte este rincón de la Web para que sepas TODO antes de que vayas a visitar el Hayedo de Montejo.

El hayedo de Montejo tiene la catalogación oficial de Sitio Natural de Interés Nacional. Posee 222 hectáreas con una altitud máxima de 1.600 metros aprox y se encuentra rodeado de una flora y fauna exspectacular. En 2017 la UNESCO declaró al Hayedo de Montejo, Patrimonio Natural de la Humanidad

Visita guiada Hayedo de Montejo

Senda Virtual del Hayedo de Montejo

El Hayedo de Montejo, antiguamente conocido como el monte de El Chaparral de Montejo, se encuentra en el noreste de la Comunidad de Madrid, en el alto valle del Jarama, dentro del término municipal de Montejo de la Sierra.

Forma parte de la Sierra del Rincón, conocida también como Sierra Pobre; ambos calificativos reflejan el aislamiento que tradicionalmente sufrieron los municipios de esta sierra con respecto a otros municipios de la Comunidad de Madrid. Quizá por ello guarda hoy un especial encanto.

Entradas y visitas al Hayedo de Montejo

La importancia de un entorno natural de tales características hace que todos debamos tener un cuidado especial. De ahí que las visitas al Hayedo de Montejo estén restringidas y haya que obtener una acreditación obligatoriamente para visitarlo. Esta acreditación o entrada se puede conseguir de forma anticipada a través de la página web www.sierradelrincon.org

Además, otra parte de ellos queda disponible para las personas que las soliciten en el Centro de Información de la Reserva de la Biosfera de la Sierra del Rincón, pero ya solo para el mismo día de la visita y hasta que se agoten.

Si deseas contactar con el Centro de Información Reserva de la Biosfera Sierra del Rincón:

Teléfono de contacto: 91 869 70 58
Horario de atención telefónica: de 9:30 a 14:45
Dirección: C/ Real 64, Montejo de la Sierra, Madrid
Correo electrónico: info.reservabiosfera@sierradelrincon.org

Área Recreativa en el Hayedo

El área recreativa se encuentra situada junto a la entrada del Hayedo de Montejo. Además del bosque de hayas, hay que destacar en esta zona los robles centenarios, la vegetación de ribera del cauce del río Jarama y los pinares de pino silvestre. Las infraestructuras existentes son mesas, fuentes y contenedores.

Acceso: Calle la Castilla, 28190 Montejo de la Sierra, Madrid 

Desde el municipio de Montejo de la Sierra, se accede a través de la carretera M-139, km 8 dirección El Cardoso.

Contacto: 901 525 525 (C.M.A)

Situación del Hayedo de Montejo

Llegar al Hayedo de Montejo es sencillo. Aunque nos gustaría avisarte de antemano que no existe una conexión mediante trasporte público de Montejo de la Sierra hasta el Hayedo de Montejo,

Recuerde también que, si no tiene las acreditaciones de visitante, no podrá acceder al entorno del Hayedo de Montejo.

  • Normas de Comportamiento

No salirse de las sendas marcadas y evitar la recolección de cualquier elemento vegetal (plantas, flores, hojas, setas, frutos, etc.) durante el recorrido.
No está permitido fumar, comer ni introducir ningún tipo de animal doméstico en el interior del bosque. 

Sendas por el Hayedo de Montejo

Desde el 13 de junio de 1989 las visitas al Hayedo de Montejo son guiadas y necesitarás una acreditación de visitante. Conseguir acreditación

Guía realizada por un aficionado del Hayedo de Montejo

Senda del Río

Recorrido lineal que discurre paralelo al Jarama. Permite la observación de la mayoría de los ambientes del Hayedo: bosque adehesado de melojo, bosque mixto de melojo y haya, vegetación asociada al río, fustal de hayedo, matorral, etc. Concluye en una explanada con abundantes álamos temblones, antiguamente lugar de carboneo.

Constituye la mejor alternativa para quien visite por primera vez el Sitio Natural. Es la más recomendable para grupos familiares con niños y personas mayores y apta en parte para personas con discapacidad motórica. Además de poder contemplar algunos de los árboles más emblemáticos del Hayedo de Montejo, es el itinerario de menor dificultad por la pendiente.

Senda de la Ladera

Aunque coincide en parte con el itinerario del río, asciende por la ladera en un tramo circular. Atraviesa también manchas de fustal de hayedo, de bosque de melojo y hayedo y laderas de solana con abundante matorral.

Es también recomendable para personas que acudan por primera vez al Hayedo de Montejo, siempre que no tengan problemas de motricidad.

Una de las señas de identidad de la Senda de la Ladera es el pino silvestre, el único de gran parte que puede admirarse en el Hayedo e incluido en el catálogo de árboles singulares de la Comunidad de Madrid.

Datos técnicos

Duración: 1.45 horas. Desnivel: 115 metros. Distancia: 1.450 metros. Dificultad: media. Longitud 3.200 metros Accesibilidad: primero 500 metros

Senda del Mirador

Atraviesa los diferentes tipos de manchas de vegetación que configuran el Hayedo de Montejo, aportando algunas claves importantes sobre su evolución reciente. Incluye reveladoras panorámicas de la cuenca alta del Jarama. La senda del mirador resulta especialmente interesante para personas que ya hayan visitado el Hayedo, ya que su trazado y temática difieren del resto, de carácter más general.

Datos técnicos

Duración: 1.45 horas. Distancia: 1.450 metros. Dificultad: media. Longitud 3.200 metros. Accesibilidad: primeros 500 metros.

Historia del Hayedo de Montejo de la Sierra

Dice la leyenda que ciertos carboneros y leñadores de Montejo afirman que el bosque conocido como El Chaparral está habitado por duendes y hadas y que éstas, juguetonas y curiosas, gustaban de engatusar a los visitantes y caminantes del bosque con sus caricias y dulces cánticos. Estos cantos tan melosos y atractivos servían para llevar a los paseantes hasta sus guaridas y convertirlos en animales tales como la lagartija o el petirrojo, con el objetivo de dotar al mencionado bosque de mayor número de habitantes y lograr así mayor encanto.

Fuera así o no la llegada de fauna al Hayedo de Montejo, lo cierto es que por el año 1.460 el pueblo compra a un noble de Sepúlveda el monte de hayas y robles, a orillas del río Jarama, conocido como El Chaparral, hoy el Hayedo de Montejo de la Sierra. Aún así, se produjo algún contencioso por la propiedad de dicho monte. En un principio los señores de Buitrago expresaban que la propiedad era suya, pero cuenta la tradición que el propio Emperador Carlos I de España y V de Alemania dejó bien claro que el citado monte y bosque eran de Montejo.

Profesiones del Hayedo de Montejo

    • CARBONERO

    La figura de los carboneros fue muy típica en los pueblos, con sus silbatos y trompetillas, junto a sus ennegrecidos carros, esperando que las vecinas salieran a la calle para comprar carbón para cocinar o para los braseros.
    La carbonera es una pila de leña que se forma de modo artesanal colocando los propios troncos de leña en forma de cono y cubriéndolos de una capa de tierra de unos de 20 cm de grosor. En la parte superior del horno se practica una chimenea y se hacen respiraderos en la base para avivar el fuego. Se introducen brasas por la chimenea y se alimenta con tacos de madera regularmente, llevándose a cabo la combustión en ausencia de oxígeno.

    El horno o carbonera era hecho de forma manual por los carboneros. Se tardaba tres o cuatro días en que el carbón se hiciera poco a poco en el horno natural. Luego se extraía y se extendía durante otros dos o tres días para que se enfriase. Tras ello, se transportaba el carbón, antiguamente al lomo de las mulas o burros para llevarlo hasta la localidad más cercana.

    Han sido muchas las familias que han vivido del carbón en España durante muchos siglos, pero ya a mediados del pasado siglo XX, el sector se vería desplazado por el petróleo y, posteriormente, por la electricidad. Una demanda que bajó de forma considerable y un trabajo muy duro que, pese a intentar resistir, al final ha terminado por desaparecer, quedando en el recuerdo de todos aquellos que trabajaron como carboneros durante muchas campañas.

    • EL TEJERO

    La Puebla de la Sierra y Montejo de la Sierra abastecían de tejas al resto de las poblaciones cercanas. Cada cinco o seis años, y siempre durante el verano, se ponían en marcha los hornos para reponer las tejas de las casas viejas y proveer a las de nueva construcción.

    Fuego, agua, arcilla y un monte donde abastecerse de leña es todo los que necesita el tejero para realizar su trabajo. La teja es una pieza de barro cocido y de forma acanalada que cubre los tejados de las casas y que permiten escurrir el agua de la lluvia. En ocasiones, también se encargaban de construir baldosas y ladrillos de barro mezclado con paja (adobe) que se usaban para hacer tabiques.

    La materia prima es primordial: arcilla procedente de las capas inferiores de la tierra fértil de un cultivo, que luego se mezcla con arena y agua. Los útiles empleados son la gradilla, un molde trapezoidal y plano donde se introduce el barro y el galápago o «borrico», otro molde de madera, que le da la forma curva a la teja; un cuchillo para repasar los sobrantes que puedan quedar tras moldear el barro; un mantillo o sombrajo para que las tejas se sequen antes de meterlas en el horno. En el horno se cuecen durante 25 a 30 horas hasta que adquieren la consistencia necesaria.

    Formación del Hayedo de Montejo

    El Hayedo es un paraje insólito dentro de la Comunidad de Madrid, de ahí su importancia. Su formación en esta comarca se debe a que se juntan una serie de factores que permiten su desarrollo. Estos factores son:

    • La humedad constante y la riqueza natural del suelo, que hace que reúnan las condiciones para el crecimiento de diversas especies.
    • El microclima existente en la zona que es totalmente favorable a las especies que allí crecen. – El hecho de ser una ladera de umbría.
    • El tener una orientación capaz de captar las masas de aire húmedo que chocan contra las zonas montañosas de la Sierra.

    Su origen se remonta a etapas lluviosas y húmedas postglaciares. Es difícil que se generen en estas latitudes, de ahí la curiosidad que despierta. El Hayedo está delimitado en su parte inferior por el río Jarama. En su ribera crecen brezos, abedules, serbales, etc. En las laderas de esta zona montañosa, las hayas surgen señoriales, demostrando su poderío en esta parte de la Sierra. Algunas veces forman agrupaciones, pero casi siempre aparecen mezcladas con robles y rebollos. Otra especie muy característica del Hayedo son los acebos, que asoman de vez en cuando y sirven de refugio para ciertos animales. La altitud del Hayedo oscila entre los 1.200 y los 1.600 metros, dependiendo de la zona donde nos encontremos. Su dimensión no es muy grande, tan solo tiene aprox. 222 hectáreas. La catalogación oficial que tiene el Hayedo de Montejo es la de Sitio Natural de Interés Nacional.

    Tonalidades del Hayedo de Montejo

    Muchos son los colores que podemos encontrarnos en el Hayedo, pero todos guardan una cosa en común: la belleza con la que dotan al paisaje que estamos contemplando.

    Pocos árboles como el haya tienen una elegancia tan admirada. Su tronco fuerte, su copa equilibrada donde ramas y hojas se reparten el terreno en capas horizontales es una visión única para el disfrute del Hayedo y su colorido.

    Su majestuosidad no se ve alterada con la llegada de las distintas estaciones. En los períodos veraniegos y primaverales destacan por sus colores vivos y frescos, llenos de vida e historia. En el invierno su distinguida presencia se vuelve un poco más austera debido a que sus ramas pierden sus hojas. Pero sin embargo, cuando llega el otoño el haya se muestra más impactante que nunca, con esos tonos color pizarra, esos marrones impresionantes que crean un espacio para el ensueño y el misterio.

    Algunos amarillos, algunos verdes, algunos rojizos y anaranjados nos muestran la variedad de sus hojas, que hacen que destaque aún más la figura señorial de este árbol.

    Complementando felizmente al haya tenemos a su compañero inseparable, el roble, con porte rotundo al igual que el éste, y pieza básica de este pequeño ecosistema que es el Hayedo de Montejo.

    La presencia del río Jarama ayuda a ensalzar aún más la belleza del paisaje, con esas aguas claras y libres, que fluyen y dotan de vida al Hayedo.

    Flora y Fauna del Hayedo de Montejo de la Sierra

    Flora

    En lo referente a árboles, arbustos y plantas diversas, podemos enumerar las siguientes: Fagus sylvática, Quercus petrea y otras especies templadas como el Melojo, Endrino, Hierba de san Roberto, Madreselva, Dedalera, Acebo, Azafrán, Gamón, Rosal Silvestre, cuyo óptimo peninsular se sitúa en localidades más septentrionales. Además les acompaña Quercus Pyrenaica en una de sus escasas manifestaciones madrileñas en el monte alto.

    Este pequeño enclave muestra cómo la heterogeneidad ecológica ha condicionado la ocupación del medio, pues la profundidad del suelo es determinante para la vegetación en un lugar de sequía estival acusada.

    En el término municipal de Montejo, podemos encontrar los siguientes tipos de bosques:

    Hayedo

    El Hayedo de Montejo constituye una de los enclaves más singulares que podemos visitar en la Comunidad de Madrid, ya que es el único bosque de hayas de la región y uno de los más meridionales de Europa. Origina un sotobosque que se caracteriza por la escasez de luz que es solamente soportada por algunas especies como el acebo (Ilex aquifolium).

    Robledal

    Es la formación vegetal más característica de la Sierra del Rincón y también una de las más transformadas. En los lugares donde mejor se ha conservado o en los que se ha producido su regeneración se presenta acompañado por una gran cantidad de majuelos (Crataegus monogyna), cerezos silvestres (Prunus avium), acebos (Ilex aquifolium) y su cortejo de matorral.

    Encinar

    Existe muy poca representación del piso del encinar en la comarca debido a que supera la altitud donde se suele desarrollar. No obstante, muchas solanas del piso del robledal están ocupadas por encinas (Quercus ilex) y su vegetación acompañante: Enebro de la miera (Juniperus oxycedrus), retama (Retama sphaerocarpa), Jara Pringosa (Cistus ladanifer) y Cantueso (Lavandula stoechas).

    Pinar

    Los pinares de Montejo junto con todo el resto de la Sierra del Rincón son Pinos Silvestres (pinus sylvestris); pueden llegar a alcanzar hasta 30 ó 40 m con una copa cónica los más jóvenes e irregular los de más edad. El pino silvestre habitaba de forma natural en nuestra sierra pero sufrió una práctica extinción. Los pinares que podemos encontrar en la actualidad son el resultado de la implementación de las políticas ambientales de los años 20, que duraron hasta los años 60 con el objetivo de que fueran explotados con fines madereros.

    Bosque de Ribera

    Tienen muy poco desarrollo debido a que se encuentran en el curso alto de los ríos, a la angostura de estos y a la intensa modificación humana. En la mayoría de los casos se trata únicamente de una estrecha hilera, a ambos lados del cauce, de distintas especies de sauces (Salix sp), acompañados de algunos fresnos (Fraxinus angustifolia) y chopos (Populus Nigra).

    Por último hay que recordar que el término municipal de Montejo de la Sierra es rico en todo lo referente a la micología, y esto atrae gran cantidad de curiosos todos los años. De estas especies destacamos: Coprino Blanquinero, Colmenilla, Mucidula, Viscosa, Boleto Real, Boleto Comestible, Falsa Oronja.

    Fauna

    El municipio de Montejo proporciona una gran variedad de ambientes, lo que se refleja en una elevada diversidad fáunica. Es de destacar también la presencia de numerosas especies emblemáticas, muchas de ellas protegidas y para algunas de las cuales la comarca supone uno de sus últimos refugios en la Comunidad de Madrid.

    Como insectos característicos, se podrían destacar: Araña Lobo, Carábido, Antíope Aceitera, Mariposa, Pavo Real y el Grillo del Bosque Aurora.

    En cuanto a la fauna que presenta Montejo podemos destacar los siguientes animales:

    Mamíferos

    • Comadreja (Mustela Nivalis)
    • Corzo (Capreolus Capreolus
    • Desmán de los Pirineos (Galemys Pyrenaicus)
    • Erizo Común (Erinaceus Europaeus)
    • Garduña (Martes Foina)
    • Gato Montés (Felix Sylvestris)
    • Gineta (Genetta Genetta)
    • Jabalí (Sus Scrofa)
    • Lirón Carretero (Eliomys Quercinus)
    • Musaraña Colicuadrada (Sorex Araneus)
    • Nutria (Lutra Lutra)
    • Ratón de Campo (Mus Musculus)
    • Tejón (Meles Meles)
    • Topo (Talpa Europea)
    • Visón (Mustela Lutreola)
    • Zorro (Vulpes Vulpes)

    Peces

    • Barbo (Barbus bocagei)
    • Boga (Chondrostoma polylepis)
    • Cacho (Squalius pyrenaicus)
    • Trucha común (Salmo trutta)

    Reptiles

    • Culebra de Collar (Natrix Natrix)
    • Culebra de Escalera (Elaphe Scalaris)
    • Culebrilla Ciega (Bla nus Cinereus)
    • Lagarto Ocelado (Lacerta Lepida)
    • Lagartija Roquera (Podarcis Muralis)
    • Víbora Hocicuda (Vipera Latasti)

    Amfibios

    • Salamandra común (Salamandra salamandra)
    • Rana de San Antonio (Hyla arborea)
    • Sapo común (Bufo bufo)
    • Sapo corredor (Bufo calamita)
    • Sapo partero (Alytes sp.)

    Aves

    • Agateador común (Certhia Brachydactyla)
    • Águila clazada (hieraaetus Pennatus)
    • Águila Real ( Aquila Chryssaetos)
    • Autillo (Otus Scops)
    • Azor ( Accipiter Gentilis)
    • Cárabo (Strix Aluco)
    • Cuco ( Cuculus Canorus)
    • Estornino (Sturnus Unicolor)
    • Gavilán (Accipiter Nisus)
    • Gorrión Común ( Passer Domesticus)
    • Herrerillo Común ( Parus Caeruleus)
    • Petirrojo (Erithacus Rubecula)

    Mariposas

    • Se encuentran más del 40% de las especies de mariposas que hay en toda la Península Ibérica
    • Comviven hasta 95 especies distintas